El Ayuntamiento de Mieres, en el pleno ordinario del mes de octubre, aprobó por unanimidad la siguiente Declaración Institucional con motivo del 25N- Día Internacional de la Eliminacion de la Violencia contra la Mujer. Una declaración que se ha leído hoy en el acto institucional organizado por la concejalía de Igualdad y Feminismo en el que la ciudadanía mierense ha mostrado su rechazo a las violencias machistas y lanzado un mensaje por la igualdad real.
MANIFIESTO DE LAS ASOCIACIONES DE MUJERES DE MIERES, PARA SU ELEVACIÓN AL AYUNTAMIENTO DE MIERES CON EL OBJETO DE TOMA EN CONSIDERACIÓN COMO DECLARACIÓN INSTITUCIONAL CON MOTIVO DEL “DÍA INTERNACIONAL CONTRA LAS VIOLENCIAS MACHISTAS” DEL AÑO 2019
El 7 de febrero del año 2000, la Asamblea General de la ONU adopta la Resolución 54/134, designando el 25 de noviembre como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, invitando a gobiernos, organizaciones internacionales y a ONG a tomar cartas en el asunto y coordinar actividades todos los años sobre esta fecha que eleven la conciencia pública en cuanto a la eliminación de todas las formas de violencia contra las mujeres.
Lamentablemente, desde esa fecha, año tras año volvemos a reunirnos para seguir condenando las violencias que se siguen ejerciendo contra las mujeres. La verdadera dimensión de esta lacra, la encontramos en las frías cifras de los datos oficiales: desde el año 2003 hasta la fecha han sido asesinadas en España por sus parejas o exparejas 1.021 mujeres, 46 en lo que llevamos de año y también 3 menores asesinados por las violencias machistas como último escalón en la venganza contra las madres, quedando 34 niños y niñas en situación de orfandad. En nuestro municipio 59 mujeres están dentro del sistema de protección de víctimas, conviviendo cada día con el terror y temiendo que sus vidas pasen a engrosar estas listas.
Podríamos seguir dando cifras que evidencian esta realidad, violencias de distinto tipo y de distinto grado, ejercida sobre diferentes mujeres, de todas las edades, estado civil, de cualquier etnia, perteneciente a diferentes clases sociales. Pero tampoco serían datos exactos, ya que en las estadísticas oficiales no se contemplan los asesinatos de mujeres cuando el agresor era desconocido o no mantenía o hubiera mantenido relación de afectividad de pareja, los asesinatos de mujeres prostituidas, de españolas que residían fuera de nuestro país, de madres, hermanas, amigas…, pero que se cometieron por el hecho de que la víctima fuera mujer.
El 11 de abril de 2014 España ratificó el Convenio de Estambul, primer instrumento de carácter vinculante en el ámbito europeo en materia de violencia contra la mujer y de mayor alcance para hacer frente a esta grave violación de los derechos humanos, estableciendo tolerancia cero contra todas las formas de violencia contra la mujer: la violencia física, sexual, psicológica o económica, la mutilación genital femenina, el matrimonio forzado y el acoso, incluidas las amenazas de realizar dichos actos, la coacción o la privación arbitraria de libertad, en la vida pública o privada.
Cuando hablamos de Violencia de Géneros hablamos de desigualdad. No todas las acciones que generan desigualdad entre hombres y mujeres son violencia de género. Pero sí todos los actos de violencia machista nacen de la desigualdad. La violencia de género es una responsabilidad de toda la sociedad: instituciones, partidos políticos, asociaciones… Se trata de una violencia que afecta a las mujeres por el mero hecho de serlo. Constituye un atentado contra la integridad, la dignidad y la libertad de las mujeres, independientemente del ámbito en el que se produzca.
La discriminación de las mujeres y la violencia de género (como la manifestación más brutal de las desigualdades entre hombres y mujeres) es un problema que traspasa fronteras y que está presente en la mayor parte de los países del mundo con la particularidad de que las vivencias del maltrato son enormemente parecidas en todos los lugares y culturas. No debemos olvidar la doble discriminación de las inmigrantes que son pobres, que vienen buscando un futuro mejor y que muchas veces acaban atrapadas en las redes de prostitución, víctimas de explotación sexual y trata de personas, cuando no como trabajadoras explotadas, sueldos miserables, y condiciones inhumanas.
Educar a la infancia, desde las edades más tempranas, en una cultura centrada en la resolución pacífica de conflictos, fomentar la empatía y desarrollar una autoestima equilibrada, son principios que favorecen la desaparición de los perjuicios de género que operan desde la cuna. Eliminar los estereotipos transmitidos por la cultura patriarcal y desterrar mitos son objetivos de la coeducación y una vacuna contra las violencias machistas.
Con este manifiesto, día a día, nos comprometernos en la lucha por un futuro, el nuestro y el de las siguientes generaciones, por todas las mujeres y hombres que viven y vivirán en nuestra villa para alcanzar una convivencia en igualdad, y:
- Denunciamos y condenamos cualquier tipo de violencia que se ejerce sobre las mujeres: el maltrato físico, que deja marca y duele, que humilla y somete; el abuso verbal y maltrato psicológico, que destruye, anula y aniquila la individualidad de la mujer; o el maltrato sexual, que cosifica y denigra.
- Proclamamos que la sociedad no puede ni debe tolerar ni un asesinato ni una agresión más.
- Exigimos que las instituciones responsables articulen todos los recursos a su alcance para luchar contra esta lacra social, remando todas en la misma
- dirección, por lo que proponemos se impulse el Pacto de Estado contra la Violencia de Género.
- Reclamamos que las mujeres tengan una respuesta inmediata y efectiva cuando piden ayuda, garantizando su seguridad y propiciando su bienestar y el de sus hijos e hijas, articulando programas de atención integrales que les ayuden a recuperar una vida digna y libre de violencia.
- Demandamos que se redoblen los esfuerzos para atender las necesidades especiales de mujeres víctimas de violencia de género: mujeres con discapacidad, mujeres inmigrantes y mujeres jóvenes.
- Requerimos que desde el Ayuntamiento de Mieres se visibilice la repulsa a los asesinatos machistas poniendo una bandera lila con un crespón negro cada último jueves de mes, que muestre el rechazo ciudadano al machismo y nuestro recuerdo a las víctimas y solidaridad con sus familias. Y que se incluya en el Orden del Día de todos los Plenos Municipales una mención a las mujeres asesinadas durante el mes anterior dejando constancia de la tolerancia cero de este ayuntamiento a las violencias machistas.
- Exhortamos al desarrollo de la transversalización de las políticas de Género en el ámbito municipal, el fortalecimiento de las políticas locales para la Igualdad, y el diseño de políticas de empoderamiento con la creación de espacios de comunicación y participación de mujeres y hombres con el objetivo de favorecer la igualdad de mujeres y hombres en la vida local.
- Exigimos que en las listas oficiales de mujeres asesinadas por violencias machistas se computen todas las víctimas, extendiendo la condición de víctima de género, en concordancia con la normativa internacional.